La depresión en un mundo frenético
El primer domingo de octubre se conmemora el Día Europeo de la Depresión
El Día Europeo de la Depresión se celebra cada primer domingo de octubre, en este año 2025 será el día 5 concretamente. Esta celebración fue propuesta por la Asociación Europea para la Depresión (EDA), ya que se detectó, tras diversos estudios, que en el contexto europeo existen unos 30 millones de pacientes con depresión crónica, con un total mundial estimado de 350 millones de casos diagnosticados.
Según la Organización Mundial de la Salud, OMS, la depresión supone la mayor causa de discapacidad a nivel global. Este año 2025 el lema elegido es “The Depression in a Frenetic World”, es decir, “La depresión en un mundo frenético”.
La depresión no supone solo estar triste de forma puntual, sino que supone un conjunto de síntomas que cada persona exterioriza de manera distinta, aunque existen unas señales comunes como:
Malestar general
- Dolores indeterminados y difusos
- Falta de energía
- Falta de concentración
- Apatía
- Tristeza generalizada
- No salir de casa o de la cama
- Irritabilidad
- Falta de apetito
- Abatimiento
Es habitual escuchar casos de personas que deciden suicidarse y su contexto familiar o laboral es incapaz de entenderlo, ya que días, o incluso horas previas, estaban realizando una vida social “normalizada”, incluso riendo y, aparentemente, “disfrutando de la vida”. Las personas con depresión crónica son 21 veces más propensas al suicidio. Por eso es vital que exista un buen servicio terapéutico preventivo, para la detección temprana y acceso a tratamiento rápido, efectivo y económico.
Qué podemos hacer
¿Qué podemos hacer en este Día Europeo de la Depresión, y en todos los días del año en nuestro entorno más cercano? Como scouters, debemos estar atentas y atentos a los indicadores repetitivos, sobre todo en adolescentes, relacionados más arriba. Recordar siempre que “no somos personas expertas”, pero sí podemos ser el primer paso para una detección temprana. Contar siempre con el apoyo de la familia de la persona afectada y ser capaces de comunicarnos de forma efectiva para poder facilitar la expresión de sus sentimientos.
Para más información sobre la depresión, podéis consultar la web de la Comisión Europea Sobre Salud Mental.