Día Mundial de la Salud: las enfermedades mentales son uno de los principales riesgos para los menores

Con motivo del Día Mundial de la Salud, que se celebra el próximo domingo 7 de abril, Scouts de España quiere hacer hincapié en la importancia del contacto con la naturaleza y las relaciones sociales como un factor de protección muy importante para la salud mental en la infancia y adolescencia. Según los últimos datos de la Asociación Española de Pediatría, desde la pandemia se han incrementado los trastornos de salud mental en población infanto-juvenil en un 47% y, en la actualidad, un 25% de los adolescentes europeos presentan un problema de salud mental.

En este sentido, los psicólogos y expertos en salud mental insisten en que es especialmente importante poner el foco en los factores protectores de la salud mental en la población más joven, sobre todo en la infancia y la adolescencia, “dado que sabemos que el 50% de los trastornos mentales se inician en este periodo”, según afirma la doctora en Psicología Clínica y de la Salud Silvia Álava, quien además es divulgadora científica y autora de varios libros sobre la felicidad en distintas etapas de la vida.

Entre esos factores que ayudan a mejorar la salud mental está la posibilidad de pertenecer a una red social de apoyo y estar en contacto con la naturaleza; ambas circunstancias se dan en entidades de educación no formal como los grupos scouts: “Tener una buena red social, una red de apoyo que permita que la persona tenga un sentido de pertenencia a un grupo donde es valorado, escuchado y que pueda suponer un soporte emocional para los jóvenes es un factor protector de la salud mental”, agrega Silvia Álava, quien añade que “pasar tiempo en la naturaleza en un entorno seguro como el que se proporciona en los Scouts, fomenta emociones como la calma y la serenidad y ayuda a reducir el estrés”.

Para esta experta, además, una vez superada la etapa infantil y juvenil, ya en la edad adulta, realizar actividades como el voluntariado suponen un tercer factor protector: “Hacer cosas por los demás es uno de los factores que más influyen en la felicidad y que podrían tener un efecto positivo en el bienestar emocional. Las personas que practican voluntariado encuentran un mayor sentido a su vida. Con la amabilidad podemos generar una cadena de favores que provoque que el mundo sea un lugar mejor”.