Entrevista: Javier Asenjo
Entrevistamos a uno de los directores de 3.000, una película sobre la amistad y la superación de dos amigos de toda la vida distanciados por el tiempo y que se reencuentran en torno a la ascensión de un 3.000 que se les había resistido en el pasado. Javier Asenjo Gutierrez nos cuenta cómo fue el rodaje y cómo su experiencia como scout le inspiró para el guión de su primer largometraje.
Leyendo las crónicas del rodaje, parece que ha sido toda una aventura…
Sí, la verdad que ha sido una verdadera aventura para todos los integrantes del equipo. Ten en cuenta que el 80% de la película sino más ocurre en exteriores. Con esta película hemos hecho lo contrario a lo que te aconsejan en la escuela de cine, la película tiene más de 60 localizaciones distintas, hemos rodado con niños y con un perro y por si esto fuera poco en ocasiones hemos rodado a 3.000 metros de altura. Ha sido una aventura difícil y dura físicamente para todo el mundo pero muy gratificante. Al estar rodando tanto tiempo fuera de tu entorno se genera una camadería entre el equipo difícil de conseguir si ruedas en Madrid, de alguna manera me recordó a mis años en los scouts.
¿Qué os movió a hacer una película de este tipo?
Nuestra motivación era contar una historia reconocible para nosotros, en la que nos pudiéramos de alguna manera ver reflejados, mas allá de que los personajes puedan ser muy distintos a nosotros, sobre todo en el tipo de cosas que hubieran podido vivir. Son anécdotas que tanto Miguel Ángel como yo hemos podido tener en los años en los que íbamos de acampada con el grupo. Por otro lado una de las cosas a las que más importancia le hemos dado es que los personajes no fueran estereotipos sino que tuvieran vida, que fueran personas reales como podemos ser nosotros. De alguna manera esta película nos ha ayudado a revivir nuestros años como scouts.
¿Qué sentisteis al coronar por fin el 3.000 deseado? ¿Recordábais así la montaña? ¿Cómo se desenvolvieron cámaras y actores a 3.000 metros?
Yo personalmente tuve que subir una vez antes a localizar en la cima del pico Otal, que es donde se rodó la cima de nuestra película. La primera vez que subí, lo hice junto con nuestro guía de montaña, el director de fotografía y uno de los chicos de producción. La verdad que fue una experiencia difícilmente olvidable. La sensación que se siente al coronar la cima es complicada de expresar en palabras, cualquiera que lo haya hecho sabrá de lo que hablo, solo espero que lo hayamos sabido expresar lo suficientemente bien a través de la imágenes.
Para rodar esta secuencia tuvimos que convivir con parte del equipo a 3.000 metros de altura durante varios días, en unas condiciones bastante duras para todos, por ejemplo para que os hagáis una idea por la noches hacía tanto frio en las tiendas que era casi imposible conciliar el sueño, aun así cuando hubo que subir a la cima cargando con todo el equipo todos arrimamos el hombro y creo sin duda que gracias a esta experiencia que se realizó antes de comenzar el resto del rodaje, se creó un ambiente increíble entre todos nosotros. De hecho y como anécdota uno de los actores sufre de vértigo y lo superó como un auténtico jabato.
La película habla de amistad y superación, algo que se aprende en la montaña y también en los Grupos Scouts ¿Qué otras cosas aprendisteis vosotros en vuestra etapa scout?
Para mí personalmente mi etapa con los scouts han sido los cimientos de la persona que soy ahora, siempre me he sentido muy orgulloso de esta etapa de mi vida a pesar de todas las bromitas que hemos de soportar a lo largo de los años. Seguramente si no hubiera pasado por el grupo ahora no sería director de cine. Para mi pasar por los scouts me hizo crecer muchísimo como persona, saber trabajar en equipo, algo fundamental a la hora de trabajar en cine. Me descubrió una serie de valores de los que me siento tremendamente orgulloso.
¿Recordáis alguna anécdota de cuando erais Scouts?
Anécdotas tengo miles, como para hacer toda una trilogía, lo que recuerdo con más nostalgia son los buenos momentos que pasé junto con mis amigos, alejados de lo que de lo que el resto de los chicos de nuestra edad hacía, vivíamos como en una realidad paralela y era sólo nuestra. Recuerdo que pasado el tiempo me encontré con mis viejos amigos con los que compartí tantos buenos momentos y todos estábamos de acuerdo en la suerte que habíamos tenido de pertenecer a este movimiento.
Mucha gente no conoce qué significa realmente ser Scout ¿cómo animarías a alguien a conocer los scouts?
Creo que como organización los scouts cuentan con muchos perjuicios de cara a la sociedad, que si somos un grupo militarista y tonterías de ese calibre. Yo como he dicho antes lo único que puedo decir para animar a la gente a conocer los scouts es que para mí fueron años muy felices, creo que difícilmente me lo hubiera pasado tan bien si no hubiera pertenecido a los scouts. En una sociedad tan despojada de valores como la que vivimos, en la que lo único que manda es el color del dinero, los scouts pueden forjar en la persona una serie de valores que difícilmente encontraras en el día a día.
¿Cuándo se estrena vuestra película? Qué van a encontrar nuestros y nuestras scouts al ir a verla…
La película aún no tiene fecha de estreno, en estos momentos estamos terminando el montaje y aún queda toda la postproducción, nuestra idea es tratar de que la película se pueda estrenar en algún festival, y seguramente el año que viene se podrá ver en los cines. A los scouts les diría que creo que van a encontrarse con una película en la que se van a reconocer y con la que se van a divertir. Por otro lado 3.000 habla del concepto de la amistad por encima de todo, creo que es una película que cuando terminas de verla te dan ganas de llamar a tus amigos y volver a revivir antiguas hazañas.
