¿Por qué mola mi barrio?

Hoy os traigo un reportaje de lo que más me gusta: de dónde vivo.

Yo vivo en Valladolid (Castilla y León), más concretamente en el barrio de Parquesol. Está al suroeste de la ciudad, ubicado en el Cerro de la Gallinera, a unos 760 metros de altitud sobre el nivel del mar. La idea de crear un barrio en el cerro surgió en los 70: fue propuesta por el promotor inmobiliario y presidente del Real Valladolid, Antonio Alfonso. Él mismo fue adquiriendo las parcelas en las que antes había algunas granjas avícolas.

En 1979 se paralizó el proyecto por falta de previsión en la urbanización. Ya en el año 1985, el promotor Marcos Fernández retomó el plan y renombró el barrio como “Ciudad Parquesol” (nombre de su empresa). Desde 1998 la plaza mayor del barrio lleva su nombre.

Es una de las zonas más jóvenes y pobladas de Valladolid. Cuenta con dos colegios de infantil, cuatro de primaria y tres institutos de secundaria y bachillerato; algunos de ellos con ofertas de módulos y formaciones profesionales. Además de esto, cuento con dos centros para la tercera edad, con los cuales puedes contactar para hacer voluntariado.

El barrio también cuenta con múltiples puestos de préstamos de bicis públicas, que promueven el uso de este medio de trasporte por toda la ciudad para conseguir una Valladolid más limpia y ecológica.

Como en el resto de la ciudad, hay una semana en la que se celebran las fiestas del barrio, que suelen ser a finales de junio. Se ha convertido en tradición ya el cerrar una de las calles para poner puestos de feria: coches de choque, hinchables, puestos de comida, etc. Por las noches hay verbena en la plaza, la cual no te puedes perder; lo mejor es que no solo hay gente joven, hay un rango de edad bastante amplio y todo el mundo puede disfrutar de las fiestas. Una cosas que debes hacer sí o sí, si vienes a las fiestas, es cenar en el kebab del barrio (situado en una de las calles adyacentes a la plaza): un lugar muy popular y con unos precios baratos, por no olvidar que la comida tampoco está nada mal.

En el radio del barrio también se incluyen el estadio y el centro cultural, auditorio y conservatorio de la ciudad, ambos nombrados como grandes escritores nacidos en la provincia: José Zorrilla y Miguel Delibes, respectivamente.


El barrio también tiene un par de sitios muy emblemáticos que, si alguna vez pasas por aquí, no te puedes perder. El primero es el bar-cafetería Plaza Mayor, que como su nombre indica está cerca del punto emblemático de la zona, en una de las calles adyacentes, y que es genial para ir a desayunar o a tomarse un café.

Justo en la esquina de enfrente está una de las panaderías (la antigua tahona) donde mejores productos vas a encontrar, en una de las esquinas de la plaza. Eso sí, si quieres ir a comprar el pan del domingo prepárate para hacer un poco de cola.

En la calle Mateo Seoane Sobral se encuentran los dos siguientes sitios: el primero es un restaurante chino,que recuerdo como que siempre ha estado ahí. El segundo es un bar que cada vez es más famoso en toda la ciudad: en él puedes jugar alguna partida de juegos de mesa, proporcionados por el mismo bar, y escuchar algún monologo. Se trata de El Rincón del Erizo, propiedad del cómico JJ Vaquero (que como bien sabéis es pucelano y a mucha honra).

Para aquellos que buscan comer y comprar de forma ecológica, el siguiente sitio lo tenéis que apuntar. Es la ecotienda Raíces, en la calle Juan Martínez Villergas. Aparte de esta tienda, hay múltiples fruterías y demás tiendas alimentarias en el barrio donde comprar sin tener que ir lejos. Además, todos los días (excepto los domingos), hay un mercado por las mañanas en el centro de la ciudad (en plaza España,  o como es más conocida aquí, la plaza de la Bola del Mundo) con una mayor oferta de productos.

En la calle Profesor Adolfo Miaja de la Muela hay dos sitios ya icónicos entre la gente del barrio. El primero es la librería y papelería Roel, donde te puedes asegurar un trato muy cálido y amable; y el segundo ahora mismo está en alquiler, pero hasta hace unos años ahí se encontraba uno de los kioscos del barrio, “el de la Vivi”.

El último sitio no podría ser otro más que el centro cívico. Aquí se organizan exposiciones (y sus clases correspondientes) de pintura, fotografía, baile, etc. Para apuntarte lo único que tienes que hacer es acercarte al local más cercano de la asociación de vecinos, y listo.

También hay una biblioteca con dos zonas: una para los más peques y otra para los mayores con un área de estudio. En una parte anexa al centro cívico hay un salón de actos, en el que se suelen celebrar festivales de música y graduaciones de los institutos de la zona.

Gracias a su situación geográfica Parquesol tiene unas vistas increíbles: desde cualquiera de sus parques se puede disfrutar de amaneceres y atardeceres.

Hasta aquí mi reportaje sobre por qué mola mi barrio. Espero que os animéis a venir, no solo a Parquesol sino a Valladolid en general, seguro que os encanta. Mientras tanto, ¿por qué no me decís vosotros por qué mola vuestro barrio o vuestra ciudad? Estoy segura de que así todos podemos aprender algo nuevo sobre otro lugar.

Y recuerda que si tu barrio es genial pero le falta le falta un grupo scout, es casi genial. Por eso tenemos una guía que te pueda ayudar a crear tu grupo. ¡Anímate!

¡Ah! Todas las fotos han sido hechas por mí.

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